La emoción y la tradición se dieron cita en el Teatro Cervantes durante el acto central de la celebración del 40 aniversario de Los Amigos del Arte con un gran concierto lírico que contó con una puesta en escena que combinó magistralmente la música, el canto y la danza. La velada se destacó por la calidad artística y el profundo homenaje a la zarzuela, patrimonio cultural de la localidad.
Fotos de J. Tornero de Damián

El concierto contó con la participación del barítono Juan Jesús Rodríguez y la soprano Carmen Solís, quienes deleitaron al público con interpretaciones cargadas de emoción y virtuosismo. Además, la Coral Arsnova de Cieza, bajo la batuta de Balvina Serna, ofreció un repertorio vibrante y lleno de matices, complementado por la Orquesta Sinfónica del Valle de Ricote dirigida por Víctor Cano. El espectáculo no habría sido completo sin la intervención del ballet de la Escuela Profesional de Danza Charo, que aportó dinamismo y belleza a la representación.
Antes de sumergirse en la riqueza del concierto, se rindió un emotivo homenaje a Virola, uno de los pilares de la compañía, quien tristemente falleció recientemente por quien se guardó un minuto de silencio en señal del profundo cariño y la gratitud de la comunidad artística y el público por su inigualable contribución y para recordar su legado, manteniendo viva su memoria en cada nota y en cada aplauso del público, y reafirmando el compromiso de seguir honrando su pasión por la zarzuela.
La gala continuó con un emotivo acto de reconocimiento en el que la asociación entregó sus insignias de oro a aquellas personas y entidades que han contribuido al engrandecimiento de la zarzuela en Abarán. Entre los homenajeados se encontraban:
- La Asociación Amigos de la Zarzuela
- D. Gerardo Gómez Milanés
- D. Carmelo Gómez Milanés
- D. Miguel López Martínez (Grupo Europa)
- D. Rogelio Gil Serna




Estos galardones simbolizan el compromiso y la pasión por preservar y difundir un género que ha marcado la historia cultural de la localidad.

Se destacó también a Dña. Ana Fernández Cano, cuyo compromiso y dedicación han dejado una huella imborrable en la comunidad artística local. Conocida cariñosamente como “Anita”, su labor incansable en la promoción y el desarrollo de la zarzuela ha inspirado a nuevas generaciones de artistas, convirtiéndola en un pilar fundamental de la cultura en la región.

Se dio paso después al concierto donde todos ofrecieron lo mejor de sí mismos sobre el escenario.
El barítono Juan Jesús Rodríguez brilló con luz propia en el escenario. Nacido en Cartaya (Huelva) en 1969, Rodríguez se formó en el Conservatorio de Madrid y debutó en 1994 en el Teatro de la Zarzuela. Con una carrera internacional que lo ha llevado a interpretar roles emblemáticos en grandes templos de la lírica como el Metropolitan de Nueva York, la Royal Opera House de Londres y la Ópera de Los Ángeles, es reconocido por su poderosa voz y su dominio del repertorio verdiano y de zarzuela. La crítica lo señala como uno de los barítonos verdianos de referencia y su presencia en el escenario se traduce en una experiencia única para el público.

Por su parte, la soprano Carmen Solís, oriunda de Badajoz, es considerada una de las voces españolas más importantes y versátiles de su generación. Formada en el Conservatorio Superior de Badajoz y perfeccionada bajo la tutela de grandes maestros como Teresa Berganza y Peter Philips, Solís ha cosechado numerosos premios en concursos internacionales como el Manuel Ausensi, Operalia y Francisco Viñas. Su carrera la ha llevado a escenarios destacados en España y el extranjero, donde ha interpretado desde roles operísticos como Madama Butterfly y Tosca hasta personajes de zarzuela, dejando siempre una huella imborrable en el público.

En el ámbito de la danza, la Escuela de Danza Charo Trigueros ofreció una actuación que fusionó la técnica y la pasión del baile con la música en vivo. Con una trayectoria consolidada en Cieza, esta institución destaca por su enseñanza del flamenco y otros estilos, aportando al espectáculo un elemento visual que enriqueció la experiencia del público.

El acto contó también con la destacada intervención de la Coral Ars Nova de Cieza. Este conjunto, conocido por su trabajo en la polifonía y en la interpretación de música sacra y tradicional, aportó un fondo coral de gran emotividad que complementó a la perfección las interpretaciones solistas del concierto. Su compromiso con la difusión del patrimonio musical de la región es motivo de orgullo para Cieza.

La velada se completó con la magistral actuación de la Orquesta Sinfónica del Valle de Ricote, bajo la dirección de Víctor Cano, natural de Blanca (Murcia) y titulado en Dirección de Orquesta por el Conservatorio Superior de Música de Murcia, habiendo dirigido a lo largo de su carrera a diversos conjuntos, destacándose por su capacidad para extraer lo mejor de cada intérprete y por su firme compromiso con la excelencia musical. La orquesta, con su interpretación pulcra y dinámica, fue el soporte perfecto para realzar la calidad de cada actuación.

El concierto fue un recorrido por el alma de la lírica española, donde cada interpretación se convirtió en una declaración de amor al arte. La combinación de una excelente calidad vocal, la precisión orquestal y la expresividad de la danza ofrecieron una experiencia multisensorial que emocionó a los asistentes. La velada no solo celebró la música y el canto, sino que también rindió homenaje a una tradición viva, en la que la zarzuela se impone como un puente entre generaciones.

Hacia el final del concierto, el ambiente se cargó de emotividad con las palabras del presidente de la compañía Amigos del Arte, Jorge Tornero, quien cerró la gala resaltando el valor del legado lírico y la importancia del compromiso cultural en la comunidad. En su intervención, agradeció especialmente la colaboración de la Concejalía de Cultura a través de su titular, Penélope Luna y al Instituto de las Industrias Culturales y las Artes (ICA) para poder llevar a cabo este gran evento y destacó que “La pasión por la zarzuela es la esencia de nuestra cultura, y cada nota que se entona es un tributo a nuestras raíces.”

La noche culminó en una emotiva ovación colectiva cuando todos los participantes se reunieron en el escenario para entonar el «Canto a Murcia». La fusión de voces –desde solistas hasta el coro– se alzó en un himno de orgullo y unidad regional, y no tardó en contagiar al público. Con el Teatro Cervantes en pie, cada nota resonaba con fuerza, mientras los asistentes aplaudían celebrando no solo la música, sino también la rica herencia y el espíritu de la tierra murciana.
Vídeo resumen de la gala:
