El Parque de la Noria de Abarán se convirtió anoche en un emotivo escenario de recuerdos, anécdotas y nostalgia con la presentación del libro «El espíritu del Chinarrillo: La Revancha», escrito por Joaquín Gómez Gómez. El acto congregó a un numeroso público que superó con creces las previsiones iniciales, en una cita que mezcló historia local, pasión deportiva y memoria colectiva.
Una apertura con sabor a tradición
El evento comenzó con la intervención del concejal de Tradiciones y Turismo del Ayuntamiento de Abarán, D. Jaime Tornero, quien dio la bienvenida al público y destacó la relevancia cultural del encuentro. Recordó, con humor, cómo inicialmente se habían preparado “30 sillas”, aunque finalmente se ocuparon más de 120, reflejo del interés que despertaba la cita. Además, anunció que coincidiendo con el acto se encenderían por primera vez las nuevas luces de la Noria Grande, lo que aportó un carácter simbólico y entrañable a la jornada.
El valor del Chinarrillo en la historia local
A continuación, tomó la palabra D. Miguel López, presidente de Grupo Europa, encargado de presentar la obra. López recordó con emoción al histórico campo del Chinarrillo como “uno de los espacios de mayor influencia en el devenir deportivo y humano de los jóvenes en los años 60”, y elogió la capacidad del autor para transmitir la ilusión de aquellos tiempos en sus páginas.
La voz de Joaquín Gómez: recuerdos y anécdotas
El autor, Joaquín Gómez, conocido cariñosamente como Joaquinito de Gálvez, inició su intervención con agradecimientos y un tono cercano. Dedicó el libro “a las almas de aquellos jóvenes ilustres que engrandecieron el Chinarrillo y que ahora no están con nosotros”, y recordó también a los padres “porque si no nos hubieran llevado al Chinarrillo, no habría existido”.
Con gran expresividad, Gómez repasó el origen del campo y cómo se convirtió en el epicentro de la vida juvenil de la época. Explicó que el libro recoge la historia de la famosa revancha entre los equipos de la OJE y la Imprenta Templado, relatada con una mezcla de memoria y fantasía. “No todo es realidad, hay parte de invención —admitió—, pero muchas fantasías terminan convirtiéndose en realidad”.
El público asistente estalló en risas al recordar una de las anécdotas más curiosas de aquel histórico partido. Relató que, en la mañana de la revancha, Clepo, recién llegado de Italia, saludó al policía local César con un cordial “Buon giorno”. Sin embargo, este entendió algo distinto y le contestó con sorna: “¿Bochorno? ¡Pues no es nada para lo que va a caer hoy!”
El escritor continuó relatando momentos entrañables, como cuando contó que, en pleno partido, al lesionarse un portero, un compañero le dijo: “Tómate una Coca-Cola y una aspirina”, a lo que Dominguito contestó que no quería nada, recibiendo la réplica: “Tú te callas, que tú no sabes nada de la vida”.
Otro de los momentos divertidos llegó con el recuerdo de Avelino, quien relató que en aquellos años apenas había balones en el pueblo. El único que existía era uno de plástico, propiedad de Joaquín Gómez, que “pesaba tanto que apenas se levantaba del suelo”. Todas las tardes lo llevaba al Chinarrillo para que los demás pudieran jugar. Sin embargo, cuando no estaba conforme con el equipo en el que le tocaba, Joaquín recogía su balón y se lo llevaba a casa, obligando a los demás a correr detrás de él para convencerle de que regresara al campo.
El momento más celebrado llegó cuando recordó cómo, siendo suplente eterno, saltó al campo por error: “Cuando me vio el entrenador se quedó blanco y dijo: ‘Madre mía, si este no corre’… pero al final marqué un gol que todavía sueño como si ocurriera de verdad”.
Compromiso Municipal
El alcalde de Abarán, Jesús Gómez, cerró el turno de intervenciones institucionales destacando que el libro es “un ejemplo de cómo las generaciones pasadas supieron obtener lo máximo de lo mínimo”, y subrayó que obras como esta ayudan a construir “memorias colectivas que refuerzan la identidad del municipio”.
Asimismo, dejó caer la posibilidad de recuperar el espacio del Chinarrillo: “Esa fantasía que se vuelve realidad… a lo mejor pasa con el Chinarrillo”, apuntó, despertando aplausos entre los asistentes.
La voz de los protagonistas
El acto culminó con un animado turno de preguntas en el que intervinieron algunos de los protagonistas históricos que vivieron aquellos años en el Chinarrillo. Entre ellos, varios recordaron partidos, fichajes y anécdotas entrañables.
Las intervenciones, cargadas de humor y emoción, terminaron de dar forma a un acto que se convirtió en un verdadero homenaje a un espacio deportivo que marcó a varias generaciones de abaraneros.
Una noche de memoria y comunidad
La presentación concluyó con la firma de ejemplares por parte del autor y una foto de grupo con los veteranos del Chinarrillo. Todo ello, acompañado del encendido de las nuevas luces de la Noria Grande, que brillaron como símbolo de la memoria compartida de un pueblo que, por una noche, volvió a reunirse alrededor del espíritu de su mítico campo de fútbol.
Vídeo del acto:
