La nueva imagen será bendecida el próximo domingo día 01 de Julio, día de la Preciosísima Sangre de Cristo en la Solemnidad de San Pedro y San Pablo a las 20:00 horas en la Iglesia de San Juan Evangelista de Blanca en el corazón del Valle de Ricote. La ceremonia estará presidida por el párroco Don Gines Amor Molina.
La obra del imaginero de Calasparra Don Juan José Páez Álvarez representa la imagen de Cristo cautivo o prendido y tomará la advocación de la Salvación sustituyendo a la actual que es de un menor tamaño. Ha sido esculpida por el mismo escultor de la primera imagen que fue realizada hace unos 10 años. La talla policromada es de vestir y mide 1,60 cm de alta habiendo sido realizada en madera de cedro real cabeza, manos y pies.
Representa al Señor en el momento del prendimiento, traicionado y abandonado por los discípulos. Es el momento donde comienza su pasión tras el sufrimiento de la oración del huerto, el momento donde se produce la entrega del Señor para salvar al género humano, donde la Historia de la Salvación llega a su cumbre con la entrega voluntaria de Jesús al plan salvador del Padre. El momento de la Nueva Alianza sellada con su sangre.
Esta nueva imagen ha sido un deseo personal por parte del hermano mayor de la hermandad José Fernando Bermejo Turpín quien gracias a la amistad personal que mantiene con el escultor Juan José Páez Álvarez y, tras varios años, ha sido posible su realización. Va a ser bendecida de manos del sacerdote Gines Amor Molina con quien mantienen una gran amistad.
Este mismo día y tras la bendición, a las 22:00 horas la imagen será presentada en la Barriada Virgen del Oro, en su capilla junto a la Plaza San Juan Pablo II a donde ya llegará bendecida. El Santísimo Cristo de la Salvación aguardará junto a sus fieles la llegada anual de su Triduo y Solemne Procesión en la noche del Jueves de Pasión donde el Señor de la Salvación recorre las calles de su Barriada.
Se invita a todos los vecinos a esta cita tan singular. El hermano mayor de esta hermandad muestra su deseo de que la nueva imagen despierte devoción y piedad popular, que nos sirva a todos para mirar al Señor y convertirnos a Él.
