Varios «Zetas» y tres furgones de la Policía Nacional de la Brigada de Extranjeria y Fronteras se desplazaron la tarde de este jueves hasta nuestra localidad para realizar una operación de control conjunta con la Policía Local, contra la inmigración ilegal en la que también participaron representantes de la inspección de trabajo.
El amplio dispositivo estuvo formado por cerca de una treintena de agentes.

En la operación policial, se realizaron 7 inspecciones en locales comerciales regentados por personas de nacionalidad extranjera para comprobar la situación laboral de los trabajadores y su estancia en nuestro país, por si incurrieran en alguna infracción a la Ley de Extranjería.

El balance de este dispositivo fue de casi 50 personas identificadas y el levantamiento de varias actas por parte de la inspección de trabajo. En esta ocasión no hubo detenidos.