La Guardia Civil de la Región de Murcia desarrolló una investigación para el esclarecimiento de hurto de esparto arrancado ilegalmente y en una zona de especial protección medioambiental, que concluyó con la imputación de un vecino de Cieza como presunto autor del hurto y de una presunta simulación de delito.
Las actuaciones se iniciaron el pasado mes de junio cuando, a través de una denuncia interpuesta por el Ayuntamiento de Cieza, se notificó la desaparición de 30.000 kilos de esparto que se encontraba decomisado y precintado en el paraje El Picarcho, al estar arrancado de forma ilegal, careciendo de autorización administrativa para su aprovechamiento.
Previamente, agentes medioambientales de la Región de Murcia, sorprendieron a varios trabajadores del ahora investigado arrancando el esparto, por lo que procedieron al decomiso y precinto del mismo. El material decomisado se depositó en el citado paraje para su posterior retirada, quedando a disposición del Ayuntamiento de Cieza, toda vez que se había comprobado que carecían de autorización administrativa para tal actividad.
Una vez realizados todos los trámites administrativos por parte del Consistorio, se acordó la retirada del esparto decomisado, principalmente por el riesgo de incendio al encontrarse éste en avanzado estado de secado. Para ello se designó una empresa, la cual procedió a la retirada de parte del producto que se encontraba precintado en el monte. La empresa designada por el Consistorio Municipal de Cieza realizó dos retiradas y cuando se disponía a hacer una tercera, observó que el resto del esparto había desaparecido.
Mientras tanto, el responsable de la empresa que retiró el esparto de forma supuestamente ilegal, aun habiendo sido informado de que se encontraba decomisado y precintado, presentó una denuncia ante la Guardia Civil por el robo del mismo, a sabiendas del estado en que se encontraba el producto.
Fue entonces cuando la Guardia Civil inició las investigaciones y realizó la inspección ocular, con el fin de obtener pruebas o indicios de la presunta autoría del hecho. De las investigaciones desarrolladas se localizó una empresa, de la cual era proveedor la empresa que había recolectado el esparto de forma ilegal, comprobándose que el ahora investigado, durante todo el periodo del trámite del decomiso y precinto del esparto, no solo no dejó de hacer envíos semanales, sino que los envíos y cantidades se incrementaron durante ese periodo, a pesar de haber denunciado el robo de más de 68.000 kilos de producto. La persona investigada y las diligencias instruidas han sido puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Cieza.