La Guardia Civil de la Región de Murcia, en el marco de los servicios establecidos para prevenir y perseguir el tráfico de drogas, ha desarrollado la operación ‘Chasles’, en la que se ha desarticulado un grupo delictivo que dirigía un activo punto de venta de drogas ubicado en el casco urbano ciezano.
Durante la operación, los guardias civiles han detenido a los cuatro integrantes del grupo delictivo como presuntos autores de delito contra la salud pública, por tráfico de drogas, y delito de defraudación de fluido eléctrico. Además, en el registro efectuado se ha aprehendido más de un centenar de dosis de cocaína, alrededor de 100 gramos de hachís y gran cantidad de medicamentos; y se han intervenido otros objetos vinculados al tráfico de drogas, como balanzas de precisión, efectos utilizados para el envoltorio y preparado de las dosis, efectivo, un turismo y gran cantidad de munición de caza, entre otros.
Las actuaciones se iniciaron el pasado año, cuando efectivos de Prevención de Seguridad Ciudadana de la Benemérita abrieron la operación para verificar una serie de indicios sobren la existencia de un punto de venta de drogas ‘al menudeo’ habilitado en una vivienda del casco urbano ciezano.
Las primeras pesquisas practicadas permitieron a los investigadores ubicar un inmueble y verificar las sospechas. Los guardias civiles comprobaron que la vivienda recibía un elevado número de visitas de personas, tanto a pie como en vehículo, las cuales, tras permanecer apenas un minuto en la vivienda, la abandonaban.
En los dispositivos de vigilancia efectuados sobre la vivienda, los guardias civiles también comprobaron que el número de visitas se incrementaba conforme avanzaba el día, siendo el horario vespertino y nocturno y, sobre todo, los días previos al fin de semana donde más se recibían visitas. También se constató que entre los supuestos compradores se encontraban numerosos consumidores habituales de Cieza y de municipios limítrofes.
La Benemérita continuó con la investigación hasta que identificó a las personas que regentaban el activo punto de venta de drogas. Los sospechosos eran cuatro integrantes de un clan familiar con antecedentes por delitos similares, que distribuían principalmente cocaína y hachís.
Una vez obtenidos todos los indicios necesarios, la Guardia Civil ha llevado a cabo la fase de explotación de la operación, en la que se ha localizado y detenido a los cuatro sospechosos, como presuntos autores de delito contra la salud pública, por tráfico de drogas; y delito de defraudación de fluido eléctrico, tras detectar una conexión ilícita a la red eléctrica en la vivienda utilizada como punto de venta de drogas.
En el registro efectuado en la vivienda, los guardias civiles se encontraron con una mesa de ‘trabajo’, en la que se halló más de un centenar de dosis de cocaína y cerca de 100 gramos de hachís, junto con utensilios de corte, balanzas de precisión, alambre y bolsas de plástico con recortes circulares que utilizaban como envoltorio para las dosis, que fueron aprehendidos.
