La Iglesia de la Ermita de los Santos Médicos de Abarán ha sido escenario esta mañana de un emotivo acto religioso y cultural que quedará grabado en la historia del municipio: la donación de la imagen del Niño Infante de la Salud a la Hermandad de la Virgen del Oro, patrona de Abarán, por parte de la Hermandad de Anderos de la Virgen de la Salud del Balneario de Archena.
El encuentro, presidido por el párroco D. Miguel Ángel Saorín, ha reunido a representantes de las hermandades del Valle de Ricote, autoridades municipales de Abarán y Archena, y numerosos fieles que llenaron el templo para ser testigos de este gesto de fraternidad y fe compartida.
Un acto presentado con sentimiento y devoción
La encargada de presentar el acto fue Inés Saorín, quien abrió la jornada destacando la dimensión espiritual y el profundo simbolismo del evento:
“Nos encontramos hoy en esta querida ermita para vivir un momento profundamente emotivo y fraternal, la donación de la sagrada imagen del Niño Infante de la Salud. No podía ser de otra forma, pues el niño pasa de madre a madre, en un gesto de amor y fe”.
Saorín recordó que esta entrega “trasciende lo material” y que “representa el testimonio espiritual que se renueva y se fortalece entre dos pueblos hermanos”. También repasó la historia de la imagen, conservada durante generaciones por la familia del presidente de la hermandad de Archena, José María Gómez Molina, quien creció en Abarán y ha mantenido siempre su vínculo con la tierra natal de sus abuelos.
En su relato, evocó cómo la imagen fue protectora de su familia durante décadas:
“En 1963, cuando estalló el polvorín de Archena, su abuela tomó al Niño entre sus brazos y le suplicó que no hubiera víctimas. Desde entonces, el Niño permaneció con ellos, acompañando su hogar con presencia protectora y amorosa”.
La entrega oficial de la imagen
Tras la lectura del acta de donación por parte de Javier Gutiérrez, vicesecretario de la Hermandad de Anderos, se formalizó la entrega de la imagen a José Antonio Montiel Marín, presidente de la Hermandad de la Virgen del Oro.
“El Niño Infante de la Salud acompañará a la Virgen del Oro en todos los actos en los que ella sea el centro, para adoración de todos los vecinos de Abarán, como consuelo y fuente de esperanza y fortaleza”, señalaba el documento firmado por ambas hermandades.
Actuaron como padrinos Isabel Pérez Salmerón y Diego Guzmán Alburquerque, custodios de la Virgen de la Salud de Archena y pregoneros de sus fiestas. El acto contó también con la presencia del director del Balneario de Archena, Alfonso Vilaseca Muñoz, y de representantes de todas las hermandades patronales del Valle de Ricote.
Durante la ceremonia se hicieron entrega de diversas distinciones honoríficas. El alcalde de Abarán, Jesús Gómez Montiel, fue nombrado Caballero Custodio de Nuestra Señora de la Salud, y recibió la Medalla de Honor de la Hermandad de Archena, en reconocimiento al compromiso de fe entre ambos pueblos.
También fueron distinguidos el concejal de Festejos y Tradiciones de Abarán, Jaime Tornero Ramos, y el presidente de los Santos Médicos, Arsenio Fernández Pérez, además del párroco local, D. Miguel Ángel Saorín Rodríguez, y los padrinos del acto.
Palabras de hermandad y gratitud
En nombre de la Hermandad de la Virgen del Oro, su secretario Federico García Montiel expresó un mensaje de agradecimiento:
“Este acto, que nace del amor a la Virgen y del espíritu de hermandad, une para siempre a nuestras corporaciones bajo la mirada de María, madre de salud y consuelo. El Niño Infante será signo de esperanza y de fe para cuantos se acerquen a él con corazón abierto”.
Por su parte, José María Gómez Molina, presidente de la Hermandad de Anderos, habló con emoción de la historia familiar que rodea la imagen y de su deseo de que permanezca en Abarán como símbolo de unión:
“Es un trozo de Archena lo que dejamos hoy en este pueblo de Abarán. Este Niño ha estado en mi familia durante generaciones y hoy lo entregamos con el corazón. Gracias a todos los que lo habéis hecho posible”.
Un gesto que une pueblos y corazones
El alcalde de Abarán, Jesús Gómez Montiel, intervino calificando el acto de “histórico” y agradeciendo la generosidad del pueblo vecino:
“Es un día que guardaremos en el corazón durante años. Este gesto es un ejemplo de fraternidad y devoción compartida que fortalece el lazo entre Abarán y Archena”.
El párroco D. Miguel Ángel Saorín puso el broche final con unas palabras de espiritualidad y esperanza, recordando que el Niño Infante de la Salud recorrerá los hogares de Abarán para llevar consuelo a los enfermos y necesitados:
“Sería una alegría inmensa que el Niño estuviera lo menos posible en el santuario, señal de que está visitando las casas y amparando a los enfermos. Que la Virgen de la Salud interceda por todos nosotros”.
El acto concluyó con la bendición de las medallas de la Virgen de la Salud a una pareja de hermanos de Archena, que contraerán matrimonio en los próximos días, y con la interpretación musical que puso fin a una jornada de hermandad, fe y emoción compartida entre dos pueblos unidos por su devoción mariana.
Galería fotográfica del acto:
Vídeo del acto:
