Esta pasada madrugada la Policía Local de Abarán denunció a un joven en el operativo de vigilancia montado para evitar la práctica del botellón, al que se le incautó una navaja.
Según la ley de armas estos hechos pueden acarrear la tramitación de un expediente sancionador por la comisión de una infracción grave, con una sanción que puede ir desde 601 a 30.000 euros.