La temida gota fría que se esperaba este fin de semana dejó intensas precipitaciones en la Vega Alta que provocaron numerosas llamadas al servicio de emergencia 112 en los municipios de Cieza, Blanca y Abarán por inundaciones en garajes, sótanos calles y carreteras, aunque en la mayor parte de la Región llovió mansamente durante la mañana. El agua también causó desprendimientos en una carretera de Abarán, que hicieron necesaria la intervención del servicio de conservación de la Comunidad para retirar las piedras caídas en la calzada. El mal tiempo causó además un descenso de las temperaturas que a mediodía resultaba superior a los diez grados, dado que los termómetros pasaron de los registros veraniegos del viernes a un adelanto del otoño el sábado.
Hasta la tarde de este sábado el Azud de Ojós registró las lluvias más intensas, con 36 litros por metro cuadrado, según los datos facilitados por la Confederación Hidrográfica del Segura.
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