Este año 2022, la habitual procesión de los patronos San Cosme y San Damián y la Virgen del Oro, desde la iglesia de la Ermita hasta la parroquia de San Pablo, no se celebró como es costumbre la tarde del 26 de septiembre si no la mañana del día 27, ya que hubo de aplazarse por la lluvia.
Pese a ello, cientos de fieles acompañaron estas queridas imágenes durante todo su recorrido.
Uno de los momentos más emocionantes es cuando ambos tronos llegan a la parroquia de San Pablo y el pueblo estalla en aplausos y vivas mientras suenan los himnos de la Virgen y Abarán.
