Rocio, que brindó al ganadero, se vio desbordada desde el saludo. Pinchó en seis ocasiones
Noticia publicada en La Verdad.
La primera de las tres novilladas que componen la Feria Taurina de Blanca acabó con el triunfo del extremeño Manuel Perera, que cortó cuatro orejas y es firme candidato a estar en la fi-nal del lunes. Ofreció posibilidades la novillada de Ana Romero, de agradables hechuras.
Abrió plaza Rocío Romero con un astado que no anduvo sobrado de fuerzas. El saludo tuvo buen broche con la media de remate y en la faena de muleta, que brindó al público, la nobleza del utrero le permitió lucir en dos tandas zurdas y otra diestra. Mató con habilidad y paseó la primera oreja de la tarde.
Su segundo novillo estuvo encastado. Rocío, que brindó al ganadero, se vio desbordada desde el saludo. Pinchó en seis ocasiones. Saludó desde el tercio.
El gran triunfador fue Perera, que desorejó a su lote a base de entrega y oficio. Novillero con valor, el pupilo de Padilla recibió a su primero con un farol de rodillas e hizo un quite por tafalleras. Por dos veces brindó al público, al que se ganó, en la primera faena con un toro potable al que entendió y con el acabó en la corta distancia, sin importarle que los pitones rozaran la talaguilla.
Con el cuarto, novillo que tuvo teclas que tocar, propias de la raza, firmó una labor de total entrega, con un final dominador a base de circulares. En ambos se fue detrás de la espada. Salió a hombros.
La entrada al festejo, con restricciones por la Covid, rondó los 700 espectadores en tarde de mucho calor.
