La pedanía de La Estación de Blanca vivió ayer sábado una tarde llena de color, música y alegría con motivo de su tradicional desfile de carrozas, una de las actividades más esperadas dentro de las fiestas en honor a la Virgen del Pilar.
Aunque la lluvia hizo acto de presencia justo a la hora prevista para el inicio del desfile, obligando a retrasar la salida una hora, ni el agua ni las nubes pudieron con el entusiasmo de los participantes ni con las ganas de fiesta de los numerosos vecinos y visitantes que llenaron las calles.
A partir de las seis de la tarde, una vez mejoró el tiempo, carrozas, comparsas y grupos de baile recorrieron las principales vías de la pedanía ofreciendo un espectáculo de colorido y originalidad, con disfraces creativos, música y coreografías que arrancaron aplausos y sonrisas del público.
Entre los momentos más destacados de la jornada se vivieron las actuaciones de los grupos de baile, así como la participación de diferentes peñas y asociaciones vecinales que contribuyeron a mantener vivo el espíritu festivo y comunitario que caracteriza a las fiestas de La Estación.
El desfile concluyó en un ambiente de diversión y convivencia, con los participantes y asistentes compartiendo una tarde que, pese a la inestabilidad meteorológica, se convirtió en una gran muestra de la alegría y el compromiso festivo de los vecinos con sus tradiciones.




















