En el corazón de Abarán, la familia Hernández continúa una tradición centenaria: la elaboración artesanal de caramelos de Semana Santa. Paco Hernández, heredero de cinco generaciones de maestros confiteros, sigue las recetas ancestrales para crear estas golosinas que endulzan las procesiones de la región, especialmente en Murcia capital.
Noticia publicada en La Verdad.
«La tradición de regalar caramelos es muy nuestra, de Murcia y sus pueblos», explica Paco, orgulloso de su legado familiar. Su empresa, El Turro, junto a otros obradores en la región , se especializa en la elaboración de estos dulces tan característicos de la Semana Santa murciana.
Entre las creaciones más preciadas de El Turro se encuentran las picardías, caramelos tostados con avellana elaborados de forma totalmente artesanal para preservar su encanto tradicional. Pero en estos días, la atención de Paco se centra en los refraneros, caramelos con versos alusivos a la Semana Santa que él define como «los más emblemáticos» de la región.
Su madre, Mari Carmen Banegas, se encarga de envolver uno a uno estos pequeños tesoros que, en palabras de Paco, son mucho más que un simple caramelo: «Son la seña de identidad de nuestra Semana Santa«.
El «valor emocional» que impregna estos dulces es lo que motiva a Paco a continuar elaborándolos año tras año. Las pastillas de caramelo, en sus diferentes tamaños, representan una forma de mantener viva la tradición que envuelve a estas fechas tan especiales.
Los refraneros, con sus versos que hablan de Murcia, la huerta y la Semana Santa, son un homenaje a la cultura y la identidad de la región. En cada bocado, se palpa la pasión y el cariño que la familia Hernández dedica a este arte dulce que endulza las calles y los corazones durante la Semana Santa murciana.