La Feria y Fiestas de Abarán se iluminó con una noche de esplendor y arte el pasado sábado en el majestuoso Teatro Cervantes. El evento principal de la velada fue la emocionante Antología de Zarzuela, una colaboración entre la Orquesta Sinfónica del Valle de Ricote, dirigida por el maestro Víctor Cano, y la Compañía Lírica Amigos de la Zarzuela, bajo la dirección artística de Cristina Pons.
Antes de dar comienzo el concierto, Los Amigos de la Zarzuela ofrecieron un homenaje a varios abaraneros vinculados con el mundo del arte, la música y el espectáculo que han fallecido recientemente.
“Un recuerdo a algunos miembros que se fueron para siempre. Algunos miembros que no están, y si están, que no queremos que sea triste ni lastimoso, si no alegre y desenfadado como ellos hubieran querido. Han sido personas que disfrutaron en este escenario pero sobre todo nos hicieron disfrutar. Gente como el entrañable Joaquín Maquilón, que fue uno del los fundadores de esta compañía, en la que entró tras un intento de rebelión por parte de este maravilloso coro. Un hombre grande de cuerpo y de bondad, campechano y tierno al mismo tiempo. Y junto a su recuerdo, también nos acordamos de su mujer, Jose Yelo, que formó también parte de este coro disfrutando con la zarzuela. Nos ha dejado también otro hombre, actor y corista, entregado a todo lo que se le pidiera, siempre con el teatro de fondo, Joaqui ‘El peluquero’, enamorado de las tablas, que igual hacía de Rey Mago para los pequeños, que Cristo para Semana Santa o de Blas en El cantar del Arriero, y de otros mil personajes que interpretaba con el grupo Arte o con las Amas de Casa, con la Banda de Música, con los Amigos del Arte o con cualquiera que se lo pidiera, pues llevaba el arte dramático en la sangre. Y a los pocos días de decirnos adiós Joaqui, sin avisar siquiera, también se nos fue muy joven Leonardo Gómez, que formaba parte de nuestro coro, pues era un gran aficionado a la música en todas sus modalidades y estilos. Era hombre que derrochaba vida y que sembraba alegría allá por donde fuera. Desparramaba papelillos con las carrozas, que precisamente él colaboró para resucitar y divulgaba sonrisas junto a todo aquel que se le acercaba. Y junto a estos paisanos también se nos fue para siempre Bartolomé Herrera, que como todos los ciezanos, también quiso por su afición, amor y generosidad engrosar nuestra compañía. Aún a pesar del esfuerzo que suponía, fue constante y tenaz en la realización del trabajo que una compañía conlleva».
Los asistentes se sumergieron en el mundo de la zarzuela a medida que se interpretaban romanzas, dúos, cuartetos, coros y preludios de algunas de las obras más emblemáticas del género. Clásicos como «Bohemios», «Luisa Fernanda», «La Calesera», «Las Leandras», «El barberillo de Lavapiés», «La canción del olvido», «El último romántico» y «La boda de Luís Alonso» cobraron vida en el escenario, capturando la pasión y la belleza de la zarzuela española.
El concierto también contó con la participación especial del Ballet Charo Trigueros, añadiendo un elemento visual y coreográfico fascinante a la velada. La sinergia entre la música, la voz y la danza transportó al público a través de una experiencia multisensorial única.
Los solistas de renombre que se unieron a la velada fueron Francisco Cano, Consuelo Garres, Gonzalo Terán, Lupe Durán, Javier Ferrer, Liesel Oquendo y Carlos Gutemberger. Cada uno de ellos deleitó a la audiencia con su talento y emotividad, brindando interpretaciones conmovedoras que hicieron vibrar a los presentes.
La dirección del maestro Víctor Cano y la dirección artística de Cristina Pons permitieron que la noche fluyera con una precisión y una pasión excepcionales. La Orquesta Sinfónica del Valle de Ricote, con su sonido impecable, y la Compañía Lírica Amigos de la Zarzuela, con su compromiso con la autenticidad y la emoción, lograron una simbiosis artística que fue aplaudida de pie por el público asistente.
El Teatro Cervantes, con su ambiente clásico y su acústica de primer nivel, proporcionó el escenario perfecto para esta Antología de Zarzuela, que dejó a los espectadores con el corazón lleno de alegría y gratitud. El evento no solo celebró la rica tradición de la zarzuela española, sino que también demostró que esta forma de arte sigue siendo relevante y apreciada en el siglo XXI.
Vídeo de la Antología Lírica:
