La Guardia Civil de la Región de Murcia ha desarrollado en Abarán la operación ‘INJERTO’, una investigación iniciada por una denuncia de gestión de licencias vegetales, que se ha culminado con la investigación de un agricultor, al que se le ha instruido diligencias como presunto autor de delito contra la propiedad industrial, por la multiplicación sin autorización de una variedad vegetal que se encuentra protegida.
Los guardias civiles de SEPRONA han detectado en una explotación agrícola de Abarán el cultivo de más de 2.000 árboles frutales de una variedad de nectarina sin la preceptiva autorización, ya que esta se encuentra protegida bajo patente.
Las actuaciones iniciaron el pasado mes de febrero, cuando el titular de una patente vegetal denunció ante la Guardia Civil que en una finca de Abarán se estaba cultivando gran cantidad de árboles frutales sin autorización de este.
La Guardia Civil abrió la correspondiente investigación para verificar los hechos y, en su caso esclarecerlos, por lo que efectivos del SEPRONA se personaron en la finca en cuestión y tomaron muestras para determinar la variedad vegetal, mediante su análisis genético, y si las mismas presentaban el mismo perfil molecular de alguna de las variedades de genotipos y si tenían algún tipo de protección.
Las muestras obtenidas fueron remitidas para su análisis a un laboratorio, que emitió un informe en el que constataba que los 2.033 árboles frutalesde la finca eran nectarinosde la variedad Gartairo, una variedad protegida bajo patente.
Los guardias civiles verificaron además que esta producción agrícola no contaba con la preceptiva autorización del titular de los derechos de propiedad industrial sobre esta variedad de nectarino.
La Benemérita ha finalizado la operación con la identificación y localización del agricultor responsable de la plantación, que ha sido investigado y se le han instruido diligencias como presunto autor de delito contra la propiedad industrial por la multiplicación de material vegetal protegido sin autorización.
La reproducción de plantas, cuando se trata de variedades vegetales protegidas, siempre ha de contar con la necesaria autorización de los titulares de los correspondientes títulos de protección, tal como dispone, entre otra normativa, la Orden de 1 de julio de 1986 por la que se aprueba el Reglamento Técnico de Control y Certificación de Semillas de Plantas Hortícolas y el Reglamento (CE) nº 2100/94 del Consejo de 27 de julio de 1994, relativo a la protección comunitaria de las obtenciones vegetales, por lo que, en este caso, se han reproducido en defraudación de los legítimos derechos de propiedad industrial del titular de los derechos sobre tal variedad.
El investigado, junto con las diligencias instruidas, ha sido puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de Cieza.
