La Guardia Civil desmanteló en Cieza una plantación de marihuana que se cultivaba bajo la apariencia de cáñamo industrial. La ‘Operación Nage’ se salda, por el momento, con la incautación de 4.779 plantas de cannabis y la detención de dos personas, de origen japonés, acusadas de alquilar una finca ciezana para cultivar cannabis con una apariencia de legalidad. Según explicaron fuentes del cuerpo, la investigación ha destapado que los sospechosos tenían un comprador en Suiza al que le hacían llegar la marihuana.
Las actuaciones se iniciaron el pasado agosto cuando guardias civiles de Cieza constataron la existencia de una familia, de origen japonés, que había alquilado una finca en la zona para dedicarla supuestamente al cultivo de cáñamo industrial. Los agentes, para verificar los datos, realizaron una inspección sobre el terreno, lo que les permitió obtener documentación que comenzaron a analizar.
La Benemérita descubrió así, explican las fuentes, que la actividad no aparecía en el registro de explotaciones agrarias de la Región y no contaba con ningún tipo de autorización administrativa. Eso llevó a los agentes a sospechar que podría tratarse de una plantación ilegal encubierta tras una hipotética actividad legal de cultivo de cáñamo industrial.
Para llegar al fondo del asunto el Instituto Armado solicitó la entrada y registro tanto de la finca que la familia tenía alquilada en Cieza como de una nave industrial con la que contaban en La Estación de Blanca. Dotado de cámaras de videovigilancia, explicaron las fuentes, se sospechaba que ese almacén podría estar dedicado a almacenar el cannabis una vez listo para su distribución.
En colaboración con la Policía Local de Blanca, la Guardia Civil realizó los registros e incautó 4.779 plantas de marihuana -un millar de ellas en cogollos-, material para su distribución y abundante documentación. Los dos detenidos, vecinos de Blanca, quedaron a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Cieza, que se ha hecho cargo del caso. La investigación continúa abierta.