Unas 360 personas, de edades comprendidas entre los 75 y 79 años, recibieron durante la mañana de este jueves, la primera dosis de la vacuna contra el coronavirus del laboratorio Pfizer, en lo que ha sido la primera vacunación masiva llevada a cabo en nuestro municipio que ha tenido lugar en el Polideportivo Municipal.
Desde las 9 de la mañana fueron llegando escalonadamente hasta el recinto, las cientos de personas que previamente habían sido citadas para ser inoculadas.
El Ayuntamiento de Abarán diseñó para esta importante jornada, un circuito de entrada y salida del polideportivo, para que los usuarios pudiesen llegar hasta la puerta del pabellón municipal con sus vehículos y tras ser vacunados estacionarlos en una zona habilitada para tal fin, donde debían esperar durante 15 minutos como medida de prevención por si aparecia alguna reacción adversa al compuesto.
La inmensa mayoría de personas que acudieron fueron vacunadas en el pabellón municipal, donde se había organizado igualmente un circuito de entrada y salida, dividido en varias zonas: recepción, vacunación y espera de 15 minutos, las cuales estuvieron en todo momento supervisadas por personal sanitario de los 5 equipos que cubrieron esta vacunación.
El alcalde de la localidad, Jesús Gómez, acompañado de los concejales de Policía y Politica Social, Ignacio Carrillo y Adrián Carrillo, respectivamente, también se desplazaron hasta el centro deportivo, para comprobar de primera mano que el dispositivo que se había montado estaba funcionando a la perfección. De hecho una de las cosas que comentaban los vacunados tras abandonar las instalaciones fue la buena organización que se había llevado.
Junto a los responsables políticos también se encontraban el coordinador médico del Centro de Salud, el doctor Eduardo Carrasco y el gerente del Hospital de la Vega Lorenzo Guirao, D. Carlos Arenas.
Otro papel importante durante la mañana lo tuvo la Policía Local y Protección Civil, cuyos efectivos fueron indicando en todo momento a las numerosas personas que acudieron dónde debían estacionar, o bien cuando podían pasar al interior del recinto, para lo cual se habilitó igualmente una rampa de acceso.