La verdad es que tengo que confesar que no podría decir lo que duró el pregón de nuestro paisano Jesús Carlos Gómez, “El Catalán”, no sé si fue una hora o media o un cuarto, pues fue tal el entusiasmo con que lo llevó a cabo, fue tal la cantidad de vivencias, reflexiones, recuerdos, imágenes y, además, salpicados de piezas musicales de La Cuarentuna, que solo sé que salimos del teatro a las doce de la noche, pero poco más.
Este pregonero, sin duda, por su actividad profesional tan intensa ha preparado mil intervenciones en foros muy importantes, ante personalidades muy destacadas, en lugares muy dispersos y variados, pero me atrevo a decir que ninguna de estas actuaciones la ha preparado con el cariño, la ilusión y la dedicación con los que ha elaborado este original y apasionado y apasionante pregón.
Por decisión suya fui el encargado de hacer la presentación, en la que, entre otras cosas afirmé que “aunque su familia vivía, ya desde antes de que nacieran, en Barcelona, vinieron a la vida los dos hermanos en nuestro pueblo, pues la Marina de Trabuco, al aproximarse el momento del parto, se venía a Abaràn para estar acompañada por su madre y familia en esos momentos, y así hizo posible que el primer cielo que vieran fuera el de nuestro pueblo, que el primer llanto se oyera en la calle Queipo de Llano, hoy Doctor Molina, que los primeros arrumacos los recibieran al pasearlos por la Ermita”.
Sobre el contraste que experimentaba entre su residencia habitual y este pueblo, dije: “es verdad que, frente a este pequeño pueblo escondido en el valle, estaba la gran ciudad de Barcelona abierta al mundo, pero no por ello se le quedó el pueblo pequeño, pues si allí se divisaba Montjuic, aquí se erguía la Sierra del Oro; si allí estaba el célebre Liceo, aquí, este entrañable Cervantes; si allí estaban las Ramblas, aquí teníamos el coqueto paseo de la Ermita; si allí tenían el amplio mar, aquí el Segura que riega y enamora”.
Y llega el momento más esperado y sube al escenario Jesús Carlos y ya, desde el comienzo, el público sospecha que el pregón va a ser todo menos aburrido. Se permite guiños cargados de ironía aludiendo a su condición de “periquito” frente al alcalde que es “culé” y así poco a poco, con un gran dominio de la escena nos va transmitiendo una miscelánea de recuerdos, teniendo siempre como base a su familia, a sus padres, hermano y a tantos primos hermanos que son más hermanos que primos, pues lo primero que destaca de Jesús es su sentido profundo del valor de la familia.
Pero tras la familia, desfilan imágenes y vivencias de los amigos (Jesús Virgilio a la cabeza), referencias a los médicos de antes y de ahora, al cura Don Juan, al Churri, a Ángelo, y a un largo etcétera de personas entrañables que fue toda una satisfacción traer al escenario del recuerdo en esta noche.
No pudo dejar de expresar el agradecimiento por la colaboración que ha tenido en este pueblo con ocasión de los eventos farmacéuticos que ha organizado y que han llevado el nombre de Abarán mucho más allá de la Garita, y hasta nos sorprendió con el saludo desde Guatemala de una farmacéutica que conocía este pueblo.
Evocó eventos de la feria como la corrida de toros o las carrozas o las verbenas del Parque, produciéndose a final un momento realmente emotivo de exaltación abaranera, el canto por la Cuarentuna, con el pregonero y Piti como solistas, de ese extraordinario Himno a Abarán que su hermano Antonio compusiera en 1979, “Abarán, todos los abaraneros te amarán, porque tú eres la primicia de los pueblos españoles y todos te admirarán”. Largos y sentidos aplausos de un público entregado.
Y, con la música de fondo del Canto a Murcia, acaba con fuerza y entusiasmo llamando a los abaraneros a sentirnos orgullosos de nuestro deporte, nuestra cultura, nuestras corridas, nuestra Semana Santa, nuestro Día del Niño….llamando a que superemos los enfrentamientos y acabando con una frase que es el resumen de todos sus sentimientos: “ABARÁN, TE QUIERO CON TODO MI CORAZÓN”.
Un largo, largo aplauso de un público puesto en pie fue la mejor muestra de cómo había calado la palabra y el espíritu de este pregonero que, como afirmó el alcalde, “Nos ha regalado una parte de su vida”.
Hay que hacer referencia, junto al pregón, a la presentación de las Reinas Juveniles, cuatro jóvenes valientes y muy amantes de su pueblo, Pilar, Elsa, Selenia y Paola.
Y, si esto fue el comienzo del acto, el final, con la actuación de La Cuarentuna, fue el broche de oro a una noche realmente inolvidable, preludio de unas fiestas que nos llaman a la participación, a salir a la calle, a sentirlas tan hondo como demostró este pregonero que, teniendo su casa más allá de la Garita, tiene su corazón en este pueblo, nuestro pueblo, su pueblo.
JOSE S. CARRASCO MOLINA
Vídeo del pregón:
